¡Hey, aventureros! Si estás en Cartagena y buscas una experiencia única, no te puedes perder la Casa de la Fortuna, ubicada en Pl. de Risueño, 14. Este increíble yacimiento arqueológico te lleva de viaje al siglo I de nuestra era, mostrándote cómo era la vida doméstica en la antigua Cartagena romana. A medida que recorras las estancias de esta domus romana, podrás apreciar los detalles y la historia que envuelven cada rincón. Y lo mejor de todo, ¡la entrada incluye una visita guiada!
Ah, y si te preocupa la ubicación, no hay de qué; todo en Cartagena está al alcance de la mano. Solo tienes que llamar al 968 50 00 93 para más info, o echar un vistazo a su sitio web. Así que ya sabes, anota este plan en tu lista: la Casa de la Fortuna te espera con los brazos abiertos para que descubras los secretos del pasado. ¡No te lo pierdas!
Casa de la Fortuna
Horarios Casa de la Fortuna
| Día | Hora |
|---|---|
| lunes | Cerrado |
| martes | 10:00–15:00 |
| miércoles | 10:00–15:00 |
| jueves | 10:00–15:00 |
| viernes | 10:00–15:00 |
| sábado | 10:00–15:00 |
| domingo | 10:00–15:00 |
El horario podría cambiar.
Mapa Ubicación Casa de la Fortuna
Dónde se encuentra la Casa de la Fortuna
¡Hey, amigos! Si están buscando un plan chido en Cartagena, no pueden perderse la Casa de la Fortuna. Este lugar es una pequeña joya escondida en Pl. de Risueño, 14, 30202. Imagínate, ahí abajo hay un auténtico yacimiento romano donde puedes ver los restos de una casa antigua y hasta pisar parte de una calzada romana. Es una experiencia entretenida, aunque hay que ser sinceros, la visita es un poco corta porque la exposición no es muy grande. Aun así, vale completamente la pena, y con un precio de entrada de entre 3€ y 4€ por persona, es una ganga.
Lo que se lleva el premio a la mejor parte de la experiencia es el personal. El chico que te recibe en la entrada es un verdadero crack. ¡Enhorabuena, caballero! Su pasión por la historia y su amabilidad realmente hacen que la visita sea más amena. Te alienta a que mires cada rincón y hasta te cuenta curiosidades que no te esperas. Además, si tienen la suerte de coincidir con la guía Elia, no se van a arrepentir. Ella hace que te sientas como si estuvieras viviendo en una familia romana, contándote sobre los mosaicos y pinturas de la domus romana. ¡Todo un atractivo!
Recuerda que si tienes mascota, aquí no son bienvenidas, así que dejalas en casa. Y una cosa más, si se presentan por ahí en un día laborable, ¡no hay que esperar! Eso sí, las visitas no son aptas para discapacitados, y es recomendable preguntar por la visita guiada de 30 minutos. Se ve todo en un abrir y cerrar de ojos, así que planifica tu visita si buscas algo más a fondo.
Y para quienes se preguntan "¿Dónde se encuentra la Casa de la Fortuna?" Aquí tienen la dirección: está en Pl. de Risueño, 14, 30202 Cartagena, Murcia. Un lugar que no se pueden perder si están de paso por Cartagena. ¡Así que anímense y vayan a descubrir esta maravilla histórica!
Qué tipo de lugar es la Casa de la Fortuna
Y, siguiendo con nuestra aventura por Cartagena, no se puede dejar de lado la Casa de la Fortuna. ¡Vaya sorpresa! Imagina pasear por un espacio que te transporta a un hogar de clase alta romana de hace 2000 años. Es asombroso entrar y ver cómo, a pesar de todo este tiempo, la distribución de los ambientes se siente tan lógica y racional. La decoración es hermosa: esos frisos, la estructura… simplemente fabuloso. Además, es tan agradable saber que, al ser un lugar bien cuidado, te puedes imaginar cómo vivían aquellos romanos.
Lo mejor de todo es que no hay tiempo de espera, lo que te libera de estrés. Si decides hacer la visita un día laborable, hay una entrada súper económica de solo 2,5 euros que vale totalmente la pena. ¡Y ya que estás por allí, puedes sacar un abono que te dará acceso a otros lugares como las termas romanas y el teatro! Tu hija seguramente se lo pasará en grande. Y ni hablar de la atención; el personal que nos recibió fue excelente y nos explicó cada rincón con tanto entusiasmo que te hace sentir parte de la historia.
Ahora, hablemos de cómo se llega a este lugar. La entrada puede ser un poco escondida, así que no te desanimes si al principio te parece difícil encontrarla desde la Plaza de Risueño. Te prometo que vale cada esfuerzo. Y, si tienes suerte y te fijas, puedes ver una calle original que atravesaba la ciudad en la antigüedad, ¡una verdadera pasada! Y ese detalle del cisne-cigüeña... ¡es una virguería!
Así que, ¿qué tipo de lugar es la Casa de la Fortuna? Es, sin duda, una experiencia única que te permite investigar y admirar cómo vivía la gente de Roma en una casa de la antigüedad. Un lugar lleno de historia, bien conservado y ameno, que sin duda te dejará con una sonrisa en el rostro y muchas ganas de seguir explorando más sobre la vida romana. ¡Tienes que ir!
En qué época se sitúa la experiencia de la Casa de la Fortuna
Y hablando de la Casa de la Fortuna, ¡menuda joya escondida en Cartagena! Este lugar tiene un trabajo extraordinario de recreación histórica. Al recorrerlo, te sientes como si viajaras en el tiempo, gracias a las recreaciones virtuales de la Domus y sus habitantes. De verdad, es un sitio que vale la pena visitar, sobre todo si te gusta conocer cómo vivían las personas en la antigüedad.
El yacimiento, aunque relativamente pequeño, te permite sumergirte en la vida de una familia acomodada de Cartago Nova durante el Imperio Romano. ¡Es fascinante! Puedes pasear por las diferentes estancias de la casa y, muy cerca, explorar la calle de la época. Una de las cosas que más me impactó fue contemplar los muros de las casas y los canales que pasaban por debajo. Sin olvidar los espectaculares mosaicos en los suelos y las pinturas murales, algunas de ellas están ¡muy bien conservadas! Y, ¿lo mejor? Todo esto a un reducido precio.
Definitivamente, este es el lugar perfecto para dejar volar tu imaginación y pensar en cómo sería vivir en Cartagena hace 2000 años. Durante la visita, te ofrecen una animación en pantalla que muestra los usos y costumbres de la época, lo que ayuda a hacer la experiencia mucho más envolvente. Si te animas a visitarlo, es recomendable ir en día laborable, ya que la visita guiada es totalmente gratuita, y te aseguro que te llevarás muchas enseñanzas.
Una nota importantísima: si decides hacer la visita, intenta ir con un grupo pequeño si puedes, así podrás disfrutar mejor de todas las explicaciones. La guía es genial y está muy bien documentada, pero en un grupo más reducido, seguro que te podrías acercar más a escuchar todo. En resumen, la Casa de la Fortuna es un lugar que no puedes perderte en Cartagena.
Y para responderte la pregunta: la experiencia de la Casa de la Fortuna se sitúa en la época del Imperio Romano, más específicamente, en la vibrante vida de hace 2000 años, donde un comerciante disfrutaba de una vida acomodada en una casa que refleja poder y riqueza. ¡Así que a visitarlos se ha dicho!
Qué se puede aprender al visitar la Casa de la Fortuna
Al hablar de la Casa de la Fortuna, es imposible no dejarse llevar por la increíble experiencia de sumergirse en una vivienda romana del siglo I. Imagina recorrer las distintas estancias de una casa en la que una familia acomodada celebraba sus banquetes, recibía a sus clientes y descansaba en cómodos dormitorios. Todo está super bien conservado, y lo genial es que encontrarás pinturas murales y mosaicos impresionantes decorando cada rincón. Si te fijas bien, podrás ver motivos como cisnes, esvásticas y flores que no son solo bonitos, sino que también están llenos de simbolismo. ¡Es como viajar atrás en el tiempo!
Si te animas a hacer una visita, tendrás tiempo hasta el 7 de enero para aprovechar los horarios, que van de martes a domingo de 10:30 a 15:30. Después, solo podrás visitarla los fines de semana hasta marzo. ¡Y no se te olvide que la entrada individual cuesta solo 2,5 euros! Hay talleres y visitas guiadas que realmente enriquecen la experiencia, y, de hecho, si tienes la suerte de coincidir con un guía como el Martín, la cosa se vuelve aún más divertida. Su manera de contar la historia de Cartagena, junto a anécdotas de la excavación, es la guinda del pastel.
Y hablando de pasteles, ¿sabías que la Casa de la Fortuna también es un testimonio de lo que se ha perdido por la urbanización desenfrenada? Al visitar este sitio, te das cuenta de cuánta vida y cultura teníamos aquí antes y cómo todo puede ser destruido si no somos cuidadosos. Así que, al fin y al cabo, visitar este lugar te enseña mucho sobre no solo la vida en el pasado, sino también sobre la importancia de valorar y proteger nuestro patrimonio histórico. No hay nada como salir de allí con ganas de compartir lo que aprendiste sobre la riqueza cultural de Cartagena. ¡Definitivamente vale la pena la visita!
Qué es una "domus romana" y cómo se relaciona con la Casa de la Fortuna
¿Has escuchado hablar de la Casa de la Fortuna? Es una de esas atracciones que no te puedes perder si estás en Cartagena, y está ubicada en Pl. de Risueño, 14. La primera vez que la visité, me quedé sorprendido por lo interesante que es. Por un precio bastante asequible, puedes disfrutar de esta experiencia y, de hecho, te recomiendo que te hagas con un bono que te permita visitar otros puntos de interés en la ciudad. ¡Es una gran forma de sacarle el jugo a tu día!
Lo que realmente me dejó boquiabierto fue la forma en la que entramos. Es como si bajaras a un nuevo mundo, desde el exterior, como si fueras a un parking, y de repente, te ves en una antigua dominancia romana. ¡Es increíble! Caminar por los pasillos y salir a las antiguas calles, todo ello bajo la ciudad moderna, es como un viaje en el tiempo. Es asombroso imaginar cómo vivían los patricios de Cartago, rodeados de esos suelos de mosaico y sus elegantes habitaciones.
Para ser honesto, tenía un par de expectativas altas, y aunque la casa está muy bien conservada y restaurada, lamenté un poco que apenas quedara mosaico original. Pero eso no impidió que la experiencia fuera de 10, especialmente con la visita guiada, que fue gratuita y maravillosa. ¡Celia, la guía, fue genial! Explicó todo de forma divertida, haciendo que la historia de Cartagena y la vida en la época romana fueran súper interesantes. Se notaba que le apasionaba lo que hacía.
¿Y qué es una domus romana, te preguntarás? Es básicamente una casa típica de la antigua Roma donde vivían los patricios, lo que nos muestra la grandeza y sofisticación de su vida diaria. En la Casa de la Fortuna, puedes ver cómo era una domus en su esplendor, con sus elaboradas redes de saneamiento y estucados en las paredes. Así que si quieres saber cómo era de verdad la vida en la antigua Roma, este lugar es, sin duda, una parada obligatoria. ¡Te va a encantar!
La visita a la Casa de la Fortuna incluye algún tipo de guía
Y si hablamos de la Casa de la Fortuna, es una verdadera joya escondida en Pl. de Risueño, 14, 30202 Cartagena, Murcia. Al principio puede ser un poco difícil de encontrar, pero créeme, una vez que llegues, ¡merece mucho la pena! La casa es impresionante: una casa romana que te transporta al pasado y te ayuda a entender el día a día de los romanos. La reconstrucción de los restos es de primera y se ve que han puesto mucho esfuerzo en conservar las pinturas y los mosaicos.
Además, el guía es simplemente genial. No solo es súper amable, sino que también sabe un montón y lo cuenta de una forma que realmente engancha. Te va a hacer un combo de otros lugares que puedes visitar en la ciudad, y al final, ¡te sale mucho más económico! ¿Quién no ama un buen trato?
Por otro lado, la experiencia es bastante completa. El montaje expositivo está muy bien hecho, lo que hace que te sumerjas aún más en la historia. El horario es amplio y el ambiente es muy agradable, aunque hay que decir que el acceso a la casa es un poco raro, ya que hay que entrar por la puerta trasera. Y, bueno, hay un edificio moderno justo encima, lo que no le hace mucha justicia a este patrimonio tan bien cuidado.
Si te preguntabas si la visita incluye algún tipo de guía, la respuesta es un rotundo sí. El personal es realmente encantador y te ofrecerá explicaciones detalladas sobre lo que estás viendo, haciendo que la visita sea aún más interesante. Así que prepárate para aprender y disfrutar, ¡que esto es un planazo!